
En un acto sin precedentes, más de 6,000 personas provenientes de los 15 municipios del departamento se congregaron en el coliseo de la Universidad de La Guajira para expresar su apoyo decidido a la Reforma Agraria impulsada por el Gobierno Nacional. La Asamblea Popular Campesina, celebrada el pasado fin de semana, se convirtió en un clamor colectivo en favor de la titulación, formalización y entrega de tierras a campesinos, indígenas y afrocolombianos en la región.
La consultiva de alto nivel Afro colombiano por Yoanis Mejia Mendoza, destacó la magnitud de la movilización y el mensaje que envía al país: «Llegamos masivamente hasta Riohacha para decirle a todo el país que estamos apoyando la reforma agraria, para enviar un mensaje que necesitamos un cambio estructural en el campo para garantizar el acceso a la tierra para campesinos, negros e indígenas y así aumentar la producción de alimentos y cuidado del territorio”.
Esta histórica congregación campesina es la más grande de las 24 asambleas realizadas recientemente en todo el país en respaldo a la iniciativa del presidente Gustavo Petro. La Guajira, como uno de los departamentos priorizados en la emergencia económica y social decretada por el presidente Petro, se ha convertido en un epicentro fundamental para la materialización de la Reforma Agraria.

En este sentido, La Guajira alberga varios núcleos de focalización de la Reforma Agraria y es considerada la primera zona de protección para la producción de alimentos en Colombia. La Agencia Nacional de Tierras (ANT) ya ha dado pasos concretos en la entrega de tierras, asignando 490 hectáreas para el pueblo Kogui y 188 hectáreas para firmantes de paz en el municipio de Fonseca.
El respaldo multitudinario a la Reforma Agraria en La Guajira subraya la importancia de esta política gubernamental en la construcción de un futuro más equitativo y sostenible para las comunidades rurales, indígenas y afrocolombianas. La titulación y formalización de tierras no solo garantiza la seguridad jurídica de los campesinos, sino que también promueve un aumento en la producción de alimentos y el cuidado del territorio, elementos cruciales para el desarrollo integral de la región.